No es secreto que después de un procedimiento que involucra la extracción de alguno de nuestros dientes podemos tener mucha incomodidad y dolor, pero ¿cómo diferenciamos cuando el dolor es normal o se trata de una infección al extraer un diente? O incluso ¿puede ser algo más serio?
Antes que nada hay que recalcar que las extracciones dentales son un procedimiento seguro y directo, sin embargo a pesar de esto es posible que surjan complicaciones derivadas del procedimiento.
Es necesario saber identificarlas, a pesar de ser poco comunes, así podemos preguntar a nuestro dentista con mayor seguridad si tenemos alguna sospecha y descartarlas.
Complicaciones
Las infecciones en nuestra boca se pueden presentar de varias maneras, sin embargo no siempre la razón del dolor es una infección y en caso de que lo sea hay más de un tipo de infección.
Es necesario prestar atención a los síntomas y preguntarle a un profesional de ser necesario.
Algunas complicaciones que se pueden presentar y sus síntomas:
Alveolitis seca
Este padecimiento aparece cuando el coágulo de sangre, que normalmente aparece en lugar del diente extraído, no se desarrolla, se desplaza o se disuelve antes de que la herida haya cicatrizado y deja expuesto el hueso.
Al estar expuesto el hueso y los nervios ocultos provoca dolor al hablar o al comer, cuando pedazos de alimentos se alojan o rozan ese lugar.
Algunos síntomas son:
- Dolor intenso después de una extracción dental, que se puede extender a los oídos, cuello y otras partes de la cabeza.
- Notar una cavidad vacía dentro de tu boca, con el hueso visible.
- Mal aliento y mal sabor en la boca.
Para controlar el dolor es recomendable utilizar el medicamento recetado por el dentista.
En caso de sentirlo por más tiempo que el que se le ha indicado, comuníquese con su dentista.
Infección dental
En todos los procedimientos dentales existe la posibilidad de que entren bacterias a nuestra boca, esto puede dar pie a que se desarrolle una infección dental.
Como ya hemos mencionado, es normal que el área donde se extrae el diente duela, sin embargo es causa de alerta que el dolor dure más de lo que se indica o empeore con el tiempo en lugar de mejorar.
Algunos síntomas son:
- Mal Aliento
- Sabor Ácido o Amargo en la boca
- Fiebre
- Sensibilidad al calor o al frío
- Hinchazón o sensibilidad en las encías, mandíbula o cuello.
En caso de identificar estos síntomas es necesario ir con un dentista que hizo el procedimiento para que le de un tratamiento basado en antibióticos.
Infección de Hueso
La infección del hueso, aunque extremadamente poco común, es una situación que se puede presentar, es una condición seria que de no atenderse se puede tornar crítica.
Sucede cuando una infección en la parte superficial de la boca se propaga a las capas inferiores hasta el hueso.
Los síntomas son similares a los de la infección en la boca:
- Fiebre
- Hinchazón y sensibilidad
- Calor o enrojecimiento en el sitio
- Pérdida de peso y fatiga.
En caso de presentar alguno de estos síntomas es muy necesario comunicarse con tu médico dentista para que se trate oportunamente.
Tratamientos
La intensidad y las acciones para tratar las infecciones se manejan caso por caso, dependiendo de qué tan grave sea el problema.
En muchas ocasiones sólo es necesario el uso de antibióticos (recetados por un médico profesional) sin embargo en otras se utilizan técnicas quirúrgicas para drenar y curar el área infectada.
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